Más allá de ser acusados por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos de lavar dinero para su padre Rafael Caro Quintero, los hijos del capo fundador del Cártel de Guadalajara, Héctor Rafael, Roxana Elizabeth, Henoch Emiliano y Mario Yibrán de apellidos Caro Elanes, parecen estar sin cuentas pendientes con el gobierno de México.
Hace cinco años se publicó una lista de personas que a través de 15 empresas, la mayoría del giro inmobiliario, establecidas en Guadalajara eran utilizadas para blanquear activos.
Aparentemente las autoridades nacionales suspendieron algunas cuentas bancarias de los hijos del narco, pero al concluir las investigaciones fueron liberadas.
Los herederos de Caro Quintero mantienen un perfil bajo como empresarios, en la ciudad que es considerada como un paraíso para el lavado de dinero.
La duda persiste al revelar la Agencia Antidrogas de Estados Unidos que Rafael tomó el liderazgo en el Cártel de Sinaloa junto a Ismael ‘El Mayo’ Zambada.