Enclavado en el Sur de Jalisco, Zapotlán El Grande, conocido también como Ciudad Guzmán; es cuna de grandes artistas que destacaron en diferentes campos de las bellas artes.
Los tres más significativos son el muralista José Clemente Orozco; el escritor Juan José Arreola y la compositora Consuelo Velázquez.
Clemente Orozco es catalogado como uno de los muralistas más importantes del país; sus obras están expuestas en Nueva York, Boston, Ciudad de México, Guadalajara y otras ciudades.
Debido a que consiguió dar a sus obras un cálido clima afectivo se le conoció como “El Goya Mexicano”. El jalisciense fue un adelantado a sus tiempos y se anticipó a las tendencias neo-representativas de los años 60.
Con sus pinturas plasmó el contenido social de su época y fueron plataformas de denuncia contra la opresión y la desigualdad.
Su canción ‘Bésame Mucho’ ha sido interpretada en diferentes idiomas, Consuelito Velázquez es otra hija predilecta de Zapotlán El Grande.
Desde niña mostró talento para la música aprendiendo a tocar el piano a los cuatro años y dar su primer recital a los seis en la Academia de Serratos.
Para continuar sus estudios se trasladó a la Ciudad de México donde se graduó como pianista de concierto en el año de 1938. Tras graduarse ingresó a trabajar a la estación XEQ y desempeñó el puesto de ejecutante de música clásica.
En el campo de las letras Juan José Arreola encontró la manera de sobresalir.
Considerado como uno de los escritores más conocidos en el mundo, donde se le reconoce no sólo su humor sino la facilidad con la que borró fronteras entre realidad y fantasía, y la precisión de sus metáforas.
Autor de títulos emblemáticos como “La Feria” y “Confabulario”, es una figura clave de las letras mexicanas.
