No es la primera ocasión en la que un futbolista profesional se involucra en accidentes de tráfico con víctimas mortales.
Joao Maleck, jugador del Sevilla ‘B’, causó un trágico percance vial el pasado fin de semana que dejó como saldo a una pareja muerta.
El peritaje de la Fiscalía General del Estado (FG) confirmó que el canterano de Chivas dio positivo en la prueba de alcoholemia.
Tras salir de una fiesta, César Andrade, jugador del Atlas, impactó su vehículo en un muro de contención; el deportista era acompañado por el también futbolista Javier Amador.
Ambos eran promesas que tenía el cuadro de “La Academia” sin embargo, este accidente automovilístico los alejó de las canchas; a Andrade le fue amputada una pierna y el joven Amador fue intervenido en trece ocasiones.
Andrade se dedicó a dar conferencias a jóvenes para concientizar sobre el consumo de alcohol.
Alan Pulido, estrella de Chivas, estrelló el año pasado su Audi R8 de más de 3 millones de pesos; aunque salió ileso, su pérdida económica fue considerable.
Testigos refieren que el delantero conducía el auto a alta velocidad y bajo el influjo del alcohol.
Tres meses antes del percance del delantero de las Chivas, dos ex figuras del rebaño también protagonizaron un percance; la madrugada del 17 de julio se reportó la volcadura de una camioneta Jeep Sahara en Periférico al cruce de la avenida Federalismo, en Zapopan.
