Durante el juicio de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera el nombre de Guillermo González Calderoni, jefe policial antinarcóticos en el gobierno de Carlos Salinas Gortari, salió a relucir.
La defensa del narco afirmó que el funcionario era sobornado por los diferentes jefes de las drogas que surgieron ante la caída de Miguel Ángel Félix Gallardo, Ernesto Fonseca y Rafael Caro Quintero, los fundadores del Cártel de Guadalajara.
El propio ‘Jefe de jefes’ confesó al periodista y escritor Diego Enrique Osorno que González Calderoni estuvo detrás de la repartición de plazas entre los capos sinaloenses que siguieron el modelo de la organización criminal con sede en la capital de Jalisco.
En su libro ‘El Cártel de Guadalajara’ se mencionó que el Gobierno de México se encargó de difundir la versión de que estando preso llamó a todos los mandos medios del Cártel de Guadalajara para entregarles una ciudad y evitar un baño de sangre.
Sin embargo, detrás del plan de fragmentar a los sinaloenses estaba González Calderoni, hombre que traicionó a Félix Gallardo al detenerlo y recluirse en una prisión.
Después del gran golpe, la imagen del jefe policial se fue desapareciendo y permitió el crecimiento de los nuevos cárteles.
Guzmán Loera y sus abogados revelaron que el Cártel de Sinaloa entregó millones de dólares durante cuatro años al funcionario de la administración de Salinas.
El dato
El polémico funcionario fue asesinado en el 2003, en Texas.
