Entre los principales resultados que arrojó un análisis sociolingüístico elaborado por investigadores del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), fue que los habitantes de Guadalajara abusan de los diminutivos cuando mantienen una charla casual.
Patricia Córdova Abundis, académica de la institución, señaló que los tapatíos no sólo se valen de del diminutivo para referir o minimizar situaciones o cosas, sino también para hacerlas ver como relevantes: “La verdad sí está cerquita”, “Como que te estás poniendo pesadita”, “Al ratito te veo”, “Rapidito llego a tu casa”, “Te llamo en la mañanita”.
Para llegar a dicha conclusión la académica estudió 18 horas de charlas grabadas con hombres y mujeres de Guadalajara, que son un extracto de 72 entrevistas realizadas por un equipo de investigación.
Córdova Abundis comparó el uso del diminutivo del tapatío con otros habitantes de ciudades como Madrid o Caracas; un estudio casi pionero que arroja que mientras en la capital de España el promedio de uso del diminutivo por hablante es de 35.8 por ciento de incidencia y en Caracas de 32.5, en Guadalajara es de 53.6.
Dijo que en el dialecto del español tapatío el diminutivo tiene dos funciones, una “centralizadora”, que es cuando el hablante quiere hacer un énfasis, es decir, que no se refiere a que algo es literalmente pequeño, sino que se busca centralizar una intención. Un ejemplo sería cuando dicen “esos zapatos sí están caritos”, cuya idea es, precisamente, que los zapatos son muy costosos.
Otra función que los tapatíos dan al diminutivo es el de “descentralizador”, que es cuando se busca quitar importancia a lo que se está diciendo.