Su padre parece ser uno de los objetivos más difíciles de capturar para las autoridades mexicanas, Ismael ‘El Mayo’ Zambada prefiere no dejar rastro y evita exhibirse como lo hacen sus hijos en las redes sociales.
Incluso el uso continuo de sus cuentas en Twitter fue lo que permitió a las autoridades de los Estados Unidos dar con el paradero de Serafín Zambada Ortiz y su posterior captura.
El menor de la dinastía gustaba por compartir su vida de lujos; en fotos mostraba sus vehículos ostentosos, los animales exóticos que tenía como mascotas y el dinero que derrochaba para poder llevar a sus parejas de vacaciones o de compras.
Serafín no escondía su gusto por frecuentar los bares de moda o amistades famosas; en una aparecen su pareja y cuñada a lado del actual gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco.
En 2018 salió de prisión al cumplir su condena de cinco años y medio por traficar 100 kilos de cocaína y mil kilogramos de marihuana a los Estados Unidos.
El ejemplo de Serafín fue seguido por Ismael Zambada Imperial, ‘El Mayito Gordo’, quien también usó las redes sociales para mostrar su excéntrica vida.
Un año después de la captura del ‘Serafo’, Ismael Jr fue capturado en Sinaloa y recluido en el penal de Puente Grande; pero al estar prófugo de la justicia de los Estados Unidos fue aprobada su extradición.
Sin ser tan populares las redes como Twitter o Instagram, Jesús Vicente Zambada Niebla, no ventiló como sus hermanos sus lujos.
El hijo del capo fue extraditado a Estados Unidos en 2010, donde se declaró culpable de asociación ilícita para poseer cocaína y marihuana con objeto de distribución.
Además, fue uno de los testigos que presentó la Fiscalía de Brooklyn contra Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera.
