El interés de Guillermo del Toro Gómez por el cine se inició en una sala donde se proyectó la adaptación de 1939 de “Cumbres borrascosas”; a partir de ahí su tiempo lo destinó para cumplir su sueño de convertirse en cineasta.
Y desde su infancia ya tenía claro que debía prepararse para su futura carrera.
Mientras cursaba su educación básica en en el Instituto de Ciencias de Guadalajara, un colegio jesuita, en su adolescencia comenzó a grabar diversos proyectos.
La opción que eligió para graduarse como licenciado fue el Centro de Estudios Cinematográficos (CIEC) de la Universidad de Guadalajara (UdeG); sus estudios superiores terminaron en 1984.
El tapatío ganador al Oscar como ‘Mejor Director’ del 2018, narró que como parte de sus tesis de titulación presentó el guión: “El vampiro de Aurora Gris”, que después se tituló “Sangre gris”.
La historia la reformó y con la idea estructural fue que en 1992 la convirtió en su ópera prima: “La invención de Cronos”.
Al egresar de la UdeG se fue a Estados Unidos para estudiar maquillaje y efectos especiales.
El maestro de Guillero del Toro en estas áreas fue Dick Smith, el maquillista de la película “El exorcista”.
A su regreso fundó la primera empresa mexicana de efectos especiales, ‘Necropia’ se encargó de varios comerciales, series de televisión y 12 películas.
Fue así como comenzó su transitar en el cine, en sus anécdotas recordó como hipotecó su residencia y vendió su auto para financiar sus primeras películas.
Además, agradece a su padre Federico del Toro Torres, empresario dedicado a la compra-venta de autos, financiar su primer largometraje.
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Debido al poco financiamiento público de la época para el cine, Guillermo del Toro solicitó créditos bancarios que le cobraron intereses del 120 por ciento, para filmar ‘Cronos’.
Aunque la crítica la recibió de muy mala manera, la Academia Mexicana de Cine le otorgó nueve premios Arieles; entre ellos ‘Mejor Película’ y ‘Mejor Director’.
Pero su reconocimiento internacional lo logró al hacerse también del premio Mercedez-Benz, del Festival de Cannes.
Sin embargo, Guillermo del Toro encontró el reconocimiento internacional a sus 37 años, los filmes ‘Mimic’, ‘Hellboy’, ‘Blade II’ y “El espinazo del diablo”, lo catapultaron como un cineasta de Hollywood.
Puede ser que por ese camino tortuoso, el cineasta impulsa proyectos de jóvenes prospectos.
Guillermo del Toro y la beca a cineastas
En diferentes oportunidades el ganador del Oscar,apoyó a jóvenes para que pudieran seguir con sus estudios.
El cineasta pagó los boletos de avión a Sudáfrica para los doce integrantes del equipo de la Sociedad Matemática Mexicana (SMM) que concursaron en la olimpiada de la especialidad del 2019.
Además, junto con la Fundación Mary Street Jenkins; la organización del Patronato del FICG, AC; la Universidad de Guadalajara y la Fundación Universidad de Guadalajara AC, crearon una beca para que los jóvenes mexicanos interesados en estudiar cine reciban como financiamiento hasta 60 mil dólares.
Los recursos sirven para pagar la colegiatura anual de sus estudios, además de cubrir los vuelos de traslado hasta la ciudad sede, manutención, seguro de gastos médicos y gastos en material escolar que se requieran durante el tiempo de duración de la carrera.
Lo más sorprendente fue becar de forma individual a tres jóvenes mexicanos para estudiar una maestría en Artes en la Escuela de Imagen Gobelins, ubicada en Francia y considerada como una de las mejores escuelas de animación del mundo.
Su propia ‘Alma Máter’, la UdeG, lo consideró como un impulsor de los estudios cinematográficos.
Guillermo del Toro fue profesor de Realización de las primeras generaciones del área de enseñanza del Centro de Estudios Cinematográficos.
Todas las películas de Guillermo del Toro
A pesar de ser considera como su ópera prima, ‘Cronos’, de 1992, no fue en la primera película en la que participó el tapatío.
Guillermo del Toro logró realizar formalmente su primera película como productor ejecutivo en el de año 1985, fecha en que realizó “Doña Herlinda y su hijo”.
Pero la cinta de 1992 le abrió las puertas a los mercados millonarios; el mexicano se encargó de dirigir ‘Mimic’, las ganancias de esta película la usó para saldar sus deudas bancarias.
Y en 2001 Pedro Almodóvar financió con su productora El Deseo, en el 2001 “El espinazo del diablo”.
Un año después, en 2002, regresó a la meca del cine para dirigir ‘Blade II’.
Así se consolidó en Hollywood, su nombre se relacionó a producciones como ‘Hellboy’, en 2004; ‘El laberinto del fauno’ del 2006; ‘Hellboy 2’, en el 2008; ‘Pacific Rim’ del 2013; la versión del 2014 de ‘Frankestein’ y un año después ‘La Cumbre Escarlata’.
El parteaguas de Guillermo del Toro llegó con ‘La Forma del agua’, el film se estrenó en 2017 y para la edición del 2018 de los Oscar le entregó la estatuilla como ‘Mejor Director’ y ‘Mejor Película’.
Con ‘El Callejón de las almas perdidas’, que vio la luz en 2021, Guillermo del Toro buscará hacerse de nuevos reconocimientos y premios Oscar.
