Una de las técnicas guerrilleras que denunció la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) usó el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en contra de cuerpos de seguridad y militares fueron los drones explosivos.
Los artefactos adquiridos aparentemente a grupos clandestinos de los Estados Unidos forman parte de las nuevas armas tecnológico de uso exclusivo del Ejército, por lo que aunque se han visto sorprendidos el resultado no ha sido tan efectivo como lo esperaban.
La SEDENA afirmó que la última vez en usar drones explosivos contra los efectivos fue en una balacera en Aguililla; Michoacán, pero el ataque no dejó bajas para los efectivos y sólo hirió de forma leve a elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado.
Aparentemente los artefactos aéreos también los usó el CJNG en zonas consideradas en disputa como lo son en Guanajuato y Michoacán; autoridades de ambos estados reportaron encontrar restos del explosivo C4.
Alertó que este tipo de armas son usados por otros grupos criminales como el Cártel de Santa Rosa de Lima y Cárteles Unidos.
La razón para que los ataques con drones no sean tan letales se debe a la poca carga que pueden llevar, en días pasados se anunció que quedaron procesados dos presuntos integrantes del grupo de ‘El Marro’.
Fue el pasado 24 de abril cuando los dos acusados fueron vinculados a proceso por un juez de control por su probable responsabilidad en la violación a la Ley federal de Armas de Fuego y Explosivos. Ambos fueron señalados como presuntos pioneros en la fabricación de explosivos transportados por drones.
En agosto del 2020, un grupo de milicias ciudadanas en Tepalcatepec, Michoacán, informaron sobre el hallazgo de dos drones al interior de un vehículo blindado que presuntos sicarios del CJNG habían abandonado después de un intento de allanamiento
Los drones tenían pegados con cinta adhesiva explosivos C4 y balines de metal conectados a un sistema de detonación a distancia, explicaron los miembros de la milicia.