Su vida dio un giro radical cuando por un error cuando cometieron acciones que rayan en lo ilegal; estos jugadores de futbol jamás pensaron estar en la prisión purgando una condena por faltas cometidas.
El caso más reciente de un futbolista que salió al obtener el perdón de su esposa tras ser acusado por presunto intento de feminicidio y violencia intrafamiliar, fue el de la estrella del América, Renato Ibarra.
Su expediente era delicado y fue por ese motivo que el juez no concedió fianza para que pudiera estar en libertad.
Uno más que se mantiene recluido en el penal de Puente Grande es el juvenil mexicano Joao Maleck; el surgido en Chivas protagonizó un accidente de tráfico en Guadalajara; el saldo fue de un hombre y una mujer muerta.
Por una noche de farra se mantiene alejado de la alta competencia y la familia de una de las víctimas se mantiene en su postura de no concederle el perdón por lo que por este caso podría pasar hasta 70 años tras las rejas.
Al comprobarse su participación en una banda de secuestradores, el ex portero del Monterrey, Omar ‘Gato’ Ortiz, purga una pena de 75 años en el reclusorio de Cadereyta.
Su carrera en México terminó abruptamente por ser requerido por las autoridades de Argentina para enfrentar una denuncia de abuso sexual a una menor de edad. Jonathan Fabbro, es jugador de Jaguares y Lobos BUAP fue condenado a 14 años de prisión por abusar de su ahijada.