En el año de 1734 fue cuando por primera vez los habitantes de Guadalajara iniciaron una peregrinación a la casa de la Virgen de Zapopan para agradecerle por salvarlos de sus malestares provocados por las epidemias e inundaciones que los azotaron desde 1695.
A partir de ahí, año con año los fieles tapatíos realizan un recorrido de más de 12 kilómetros, que va desde la Catedral de Guadalajara hasta la Basílica de Zapopan.
La festividad religiosa es una de las tres más importantes del país, donde alrededor de 2 millones de personas se dan cita para agradecerla a ‘La Generala’ por un milagro.
El año pasado la UNESCO la declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Es la festividad más popular y arraigada del Occidente de México.
Además de la peregrinación, en el Centro de Zapopan se instalan juegos mecánicos y puestos de comida para el disfrute de los romeros.