El Cártel del Golfo (CDG) se vinculó a la desaparición y el asesinato de dos ciudadanos estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas; la organización criminal que fundó en la década de 1930 para traficar alcohol a los Estados Unidos durante la época de la prohibición. Los expertos en seguridad mencionan que esta banda no se consolidó debido a las pugnas internas.
Con el mando de Osiel Cárdenas Guillén, el CDG alcanzó mayor presencia en el país y se debió al surgimiento de su brazo armado formado por ex militares, bautizado como ‘Los Zetas’. Aunque su operación se limitó en Tamaulipas y otras entidades del Noreste, logró controlar la venta de cocaína, metanfetamina y marihuana en Quintana Roo.
Tras la caída de su jefe principal, Los Zetas rompieron su alianza y comenzaron a desplazar y perseguir a sus ex compañeros del crimen.
La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) identificó a siete células (Los Rojos, Los Metros, Los Fresitas, Los Dragones, Los Ciclones, Los Pelones y Los Talibanes) que pelean entre ellas el negocio del contrabando de drogas y la extracción de hidrocarburos.
Sus territorios se vieron amenazados con la presencia de cárteles como el del Noreste, de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.
Sin embargo, el Cártel del Golfo pactó una alianza con Nemesio Oseguera Cervantes, ‘El Mencho’, para crear un corredor de tráfico de fentanilo y hacer frente a Ismael ‘El Mayo’ Zambada.
¿Por qué pactó El Mencho con el CDG?
En los correos hackeados a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), conocidos como Guacamaya Leaks), se filtró un informe denominado como ‘Panorama Delictivo en el Occidente, donde se identificó a los jefes al servicio de Nemesio Oseguera Cervantes ‘El Mencho’, en Zacatecas.
Uno de los motivos de la escalada de asesinatos se debe a la alianza entre cárteles, CJNG) y Cartel del Golfo (CDG), lo anterior a raíz de la detención de su líder José Antonio Romo López (a) la Hamburguesa, con la posible finalidad de evitar que el Cartel del Pacifico (CDP), predomine en el estado.
Evaristo Cruz, alias ‘el Vaquero’, es el narco que pactó con el Cártel Jalisco Nueva Generación para llevar al Cártel del Golfo al tercer peldaño del nuevo mapa de la violencia de México.
La DEA identificó que esta alianza busca construir “corredor de fentanilo”.
Pero mantiene sus actividades ilícitas en el tráfico de cocaína y heroína, que son transportadas a Estados Unidos a las ciudades de McAllen y Brownsville, Texas.
Este criminal prófugo de la justicia fue vinculado con la entrega de despensas.
La ruta que busca afianzar va desde Zacatecas, lugar donde incrementó la violencia, debido a que en su natal Tamaulipas hay narcos que pretenden quitarle la plaza.
Sin embargo, desde San Luis Potosí, Nuevo León y ahora Zacatecas ha extendido sus tentáculos en la entidad limítrofe con Estados Unidos.
Es en esa entidad donde nació la alianza con la organización liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, ‘el Mencho’.
