Ser una mujer convencional y poco arriesga le permite hasta cierto punto complementarse con su esposo, Jacqueline Bracamontes experimenta mucho sufrimiento cada vez que su pareja, Martín Fuentes, realiza actividades extremas.
Conoció al empresario como piloto de autos de carrera y quizá creyó que cuando llegarán las hijas se iba a calmar, pero siguió en las competencias e incluso al dejarlas un poco comenzó a realizar otros deportes extremos.
Fuentes sumó a sus últimos pasatiempos la practica del ‘wing walking’, actividad que consiste en caminar sobre una avioneta en movimiento.
En sus redes sociales se observa a Bracamontes sufrir mucho y aunque está acostumbrada sólo posteó lo siguiente:
“CONFIRMADO!!! Es oficial que te falta un tornillo”.
Al parecer la vida extrema de Fuentes le provoca una enorme preocupación a la conductora tapatía.
