En la clase de Historia de quinto de primaria, se verá el tema: “Por culpa de un pastelero”, a través del cual aprenderás los motivos que dieron origen a la guerra de los Pasteles que inició el 27 de noviembre de 1838, cuando los franceses atacaron y bombardearon el fuerte de San Juan de Ulúa.
Continuaremos conociendo algunos acontecimientos de la primera mitad del siglo XIX para que después podamos comprender los procesos que se dieron durante la segunda mitad de ese siglo.
Recuerda que, en la historia, los hechos nunca suceden “porque sí”, sino que son resultado de varias causas, de la combinación de varias situaciones que se van encadenando entre sí. Entonces, sabiendo esto, vamos a profundizar un poco más en la “Guerra de los Pasteles”.
Vamos a comenzar haciendo un breve recuento de lo que hemos visto hasta ahora, de cómo era la situación en México después de que logró su independencia.
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Economía debilitada.
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Conflictos por las diferentes posturas políticas.
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Población dividida.
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México no era reconocido por muchas potencias como país independiente.
La situación en la que se encontraba nuestro país hizo que los países extranjeros quisieran venir a comerciar y obtener beneficios económicos: después de 300 años en los que España había prohibido el comercio con otras potencias europeas y sus colonias en América, cuando por fin se independizaron todos estos países americanos, las grandes potencias europeas vieron que se abría la puerta a nuevas oportunidades de negocios y ganancias. Entre esos países estaban Inglaterra, Francia y, Estados Unidos,
En nuestro país muchos comerciantes extranjeros llegaron a establecer sus negocios, el problema era que, debido a los constantes conflictos que había entre grupos políticos rivales, era muy frecuente que estos negocios resultaran gravemente dañados. Para el gobierno mexicano era muy difícil pagar los daños, por lo que los mismos extranjeros se veían forzados a pagar los daños ocasionados a sus negocios, los comerciantes extranjeros se quejaban de esta situación, pues para ellos significaba hacer grandes inversiones de dinero sin tener ninguna garantía de seguridad a cambio y empezaron a quejarse con los gobiernos de sus países de origen, “acusando” al gobierno de México por exponerlos a tener pérdidas económicas tan grandes.
Guerra de los pasteles
Quienes más se quejaban eran los franceses, ¿Quieres saber cuánto dinero decían ellos que les debía México? En la página 34 de tu libro de texto de Historia dice que les debíamos más de seiscientos mil pesos.
Muchos de los comerciantes franceses reclamaban más dinero del que habían perdido. Un ejemplo, fue un pastelero francés de apellido Remontel que tenía un restaurante en Tacubaya, se quejaba de que el gobierno mexicano le debía ¡más de sesenta mil pesos! Debido a que, una noche, algunos oficiales del ejército mexicano organizaron una reunión en la que terminaron destruyendo parte de su local y se comieron todos sus pasteles.
Esto era un exceso a los ojos del gobierno de México, que no tenía pensado pagarlo. Al respecto, en 1837 el Ministro de Relaciones, Luis Gonzaga Cuevas, declaró lo siguiente:
“…el gobierno no encuentra obligación para hacer indemnizaciones, cuando se reclaman por pérdidas a consecuencia de un movimiento revolucionario.”
Conforme fue pasando el tiempo sin llegar a un acuerdo, las relaciones con Francia se fueron poniendo cada vez más tensas y no tardaron en comenzar las hostilidades: “Gobierno inestable”, “Ejército debilitado”, “Deudas”, “Negativa del gobierno a pagar”.
¿Cuándo inició la Guerra de los Pasteles?
El 16 de abril de 1838 una escuadra de barcos franceses llegó a las costas del Golfo de México para bloquear el comercio de nuestro país con otras potencias, y así presionarlo para que pagara las deudas, por eso se llama la “Guerra de los pasteles”.
Los franceses pensaron que los mexicanos se rendirían pronto al ver bloqueado su puerto comercial más importante, pero como el gobierno mexicano no cedía, los barcos de guerra comenzaron a bombardear el puerto de Veracruz y la fortaleza de San Juan de Ulúa. Fue en ese momento que el general Antonio López de Santa Anna perdió su pierna izquierda.
La fortaleza estaba totalmente amurallada y pudo resistir los ataques de los barcos franceses, pero esto no fue suficiente para terminar con la guerra.
Finalmente, un año después de que iniciara el conflicto, el 9 de marzo de 1839 se firmó en Veracruz el Tratado de Paz entre México y Francia.
México no tuvo otra opción más que ceder ante los ataques incesantes y el enorme daño económico que le estaba causando el bloqueo de su principal puerto comercial.
México aceptó pagar la cantidad que pedían los franceses, con un adelanto de doscientos mil pesos. En la negociación fue muy importante la mediación de Inglaterra, que ayudó a que los dos países llegaran a un acuerdo y los barcos franceses se retiraran.
Observa el siguiente video para reforzar lo que hemos visto y para conocer más detalles acerca de la intervención francesa en México, del segundo 00:09 al minuto 3:47.
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180 aniversario de la Guerra de los pasteles.
Es importante comprender las múltiples causas que derivaron en esta guerra.
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