Un par de meses antes de la liberación de Rafael Caro Quintero por parte del Gobierno de México, el Departamento de los Estados Unidos reaccionó al emitir un boletín donde alertó de una red de prestanombres y firmas que presuntamente operaban con los recursos ilícitos amasados por el fundador del Cártel de Guadalajara.
Fue la Oficina de Control de Archivos Extranjeros (OFAC), por sus siglas en inglés), la responsable de sancionar a 18 personas y 15 empresas por estar vinculada con el capo mexicano; hoy prófugo, en la lista de personas incluyó a sus cuatro hijos y a la madre de éstos.
La finalidad de este boletín era prohibirle a sus corporativos y ciudadanos realizar negocios con estas presuntas empresas operadas para lavar dinero y de hacerlo serían sancionadas conforme a lo que establece la Ley Kingpin.
Los quince corporativos sancionados están conformados por más de 30 empresas de los sectores inmobiliario, de distribución de combustible, explotación minera, concesionaria de autos nuevos y usados, servicio en casetas telefónicas, restaurantes, moda y calzado, hasta productos de belleza y spa.
La mayoría de las firmas tienen su sede en Guadalajara, la residencia de sus hijos Héctor Rafael, Roxana Elizabeth, Henoch Emilio y Mario Yibran Caro Elenes.
Algunas de las compañías son: ‘El Baño de María, CX Shoes, Minerales Nueva Generación en 2010, Grupo Español Elcar, Servicio y Operadora Santa Ana, Energéticos Vago, Petro Mas.