Su reputación de mujer empoderada le permitió llegar a las altas esferas políticas y artísticas del país, en su juventud Irma Serrano, ‘La Tigresa’, se dio el lujo de rechazar a varios galanes y en su etapa de madurez aún la pretendían hombres mucho más jóvenes.
Con el tiempo, sus novios confesaron que buscaron a la artista por conveniencia y al saber de su fama y fortuna sabían que estarían en el ojo del huracán y también podrían obtener beneficios.
Uno de los romances más sonados fue el que protagonizó con Patricio ‘El Pato’ Zambrano, quien se dio a conocer en la primera versión de ‘Big Brother México’.
En muchas ocasiones dieron de qué hablar, aunque al final fue señalado de estafador, ladrón, pues en varios medios se publicaron en su momento que Patricio le robó a Serrano.
Al ver la popularidad que logró su ex compañero de reality, Alfonso ‘Poncho’ de Nigris buscó a Irma para fingir un noviazgo. En los chismes difundidos se dijo que la actriz le regaló al regiomontano un reloj ostentoso y hasta le heredó el teatro Fru Fru.
De Nigris aseguró que el reloj se lo devolvió para dejarle en claro que él no estaba interesado en cosas materiales; en la misma, reconoció que la relación con Serrano sólo había sido una estrategia publicitaria.
Hace unos días reveló que nunca accedió a tener relaciones sexuales con Irma, y que para ello, tuvo que fingir “ser gay”, con tal de que la ahora octogenaria, no insistiera.
Pero el romance que más se le recuerda fue con el cantante José Julián, quien aceptó que el estar vinculado con la Tigresa le ayudó a su carrera.
Serrano admitió estar enamorada del intérprete y anunció que pensaron en casarse, aunque rompieron su compromiso por la diferencia de edades.
