Para sus familiares la desaparición de Silvia Stephanie Sánchez, mejor conocida como Fanny, fue un suceso que las autoridades jamás quisieron aclarar; por lo que un periodista de Torreón, ciudad donde aconteció el crimen, fue el que ventiló el caso y propuso una hipótesis en su nota.
En la versión explicada en su reportaje acusa a Alfonso Martínez Escobedo, alias ‘El comandante Ardilla’, de raptar a la adolescente de 16 años con el fin de llevarla a Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, jefe de ‘Los Zetas’ en Tamaulipas.
Aunque primero las autoridades de Coahuila revelaron que la adolescente fue privada de su libertad para explotarla sexualmente, la información llegada de forma anónima en 2015 supuso que Fanny seguía viva y se convirtió en pareja del capo.
Sus padres no creen esta versión y para ellos su hija fue asesinada por criminales y quizá su cuerpo fue enterrado en los terrenos baldíos de las afueras de Torreón.
La madre de la víctima consideró que la joven que aparece en la foto junto al ‘Lazca’ no es su hija, quisieron disfrazar la sustracción de Fanny con un supuesto rumor de que ella decidió alejarse de su casa por voluntad propia.
Lo único cierto es que el caso de Fanny es uno de los miles de expedientes de personas desaparecidas que se mantienen abiertos y una víctima colateral de una guerra que parece no tener final.