Con la finalidad de evitar disputas entre bandas locales que traficaban droga, Miguel Ángel Félix Gallardo, líder y fundador del Cártel de Guadalajara, decidió reunir a los principales representantes en una sola organización.
El grupo delictivo dio cabida a una serie de desconocidos que con el pasar de los años se transformaron en los principales capos de las drogas.
Tanto ‘El Jefe de jefes’ como Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca emplearon a los hermanos Beltrán Leyva, a los Arellano Félix, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán’ y a Héctor ‘El Güero’ Palma.
Anabel Hernández, en su libro ‘Los Señores de las Drogas’, hace referencia que esta agrupación sentó las bases del narcotráfico.
El Cártel de Guadalajara y sus cabezas se dedicaron a corromper empresarios, políticos y policías para lanzar sus redes de operación; mientras unos les permitían ingresar drogas y enviarlas a los Estados Unidos, otros recibían las ganancias sucias para invertirlas en negocios legales.
El famoso sindicato de capos vio crecer sus ganancias gracias a que se contactó a Pablo Escobar para que juntos traficaran cocaína; en esos años el 60% de la droga procedente de Sudamérica ingresaba a los Estados Unidos vía México.
Antes de la caída del cártel, Félix Gallardo reunió a sus jefes para repartirles el territorio; fue así como nacieron los cárteles de Juárez, Tijuana y Sinaloa.
VER: Caro Quintero y otros narcofiesteros