A falta de confirmar si la administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) matendrá entre sus tareas principales la detención de los señores de las drogas; Nemesio Oseguer Cervantes, jefe del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), puede considerarse como prioridad de las autoridades.
El criminal que arrebató el liderazgo de trasiego de drogas a la organización de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera y mantiene un baño de sangre en casi todo el territorio nacional, provocó la activación de un operativo para poder detener el crecimiento de su grupo y evitar más muertes.
Fue en 2015, luego del derribo de un helicóptero militar a manos de integrantes del CJNG, cuando el gobierno Federal anunció la puesta en marcha de acciones para cazar al ‘Mencho’.
El Universal detalló que del 2015 al 2018 la V Región Militar, dependiente de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), ejerció más de 7 mil millones de pesos; la mayoría de los recursos fueron destinados para solventar el plan denominado ‘Operación Jalisco’, cuyo objetivo es restablecer el estado de derecho y la paz en Jalisco.
En su información se detella que para contrarrestar al Mencho será necesario el despligue de “Base de Operaciones Mixta, Puestos de Seguridad Mixtos, Bases de Operaciones de Erradicación y Puestos de Vigilancia”.
Además, en el operativo participarían la Policiía Federal, la Secretaría de Marina (SEMAR), la PGR y el Centro de Investigación y Análisis (CISEN); todos coordinador por la V Región Milinar, con sede en La Mojonera, en Zapopan.
El Universal sostiene que de los 7 mil 659 millones de pesos más de 6 mil 783 millones se usaron para sueldos, honorarios, prestaciones sociales y pagos de estímulos, y sólo 873 mdp se destinaron para gastos de operaciones (alimentación, combustible, mantenimiento, armas y municiones”.
Oseguera Cervantes es el capo más escurridizo y sobre su vida personal poco se conoce e incluso son pocas las fotografías en poder de las autoridades.
La caída de ‘El Mencho’ no es sólo prioridad de México, también lo es de los Estados Unidos, al ser el capo que más droga introduce a su territorio.