Sin ser un narcotraficante tan mediático, Osiel Cárdenas Guillén, líder del Cártel del Golfo, también tenía como pasatiempo preferido enamorar a cualquier mujer con quien cruzara palabra.
La vida amorosa del capo no fue tan documentada como la de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera, pero es digna de cualquier telenovela de Televisa o Azteca.
El periodista J. Jesús Blancornelas detalló que tras ser detenido y procesado Cárdenas Guillén, salieron tres mujeres a pelear las posesiones del capo.
Escribió que una de ellas fue la esposa del narco, Celia Salinas Aguilar, quien reclamó parte de las ganancias al convertirse en un objetivo de las autoridades.
Al parecer Celina aguantó las infidelidades y malos tratos de Osiel, pero nunca obtuvo el reconocimiento de los integrantes del Golfo y aunque presuntamente ‘lavo dinero’ no hay nadie cercano al narco que le extienda la mano para ayudarla a salir de sus problemas.
Celina tuvo hijos con Osiel y se teme que al sentirse despechada pueda originar un conflicto a mayor escala en la organización criminal.
Cárdenas Guillén tuvo varias novias, pero se dice que las más amada de todas es Hilda Flores,“La Güerita”, personaje muy conocido en todo Matamoros.
Flores goza de los beneficios de ser la mujer del jefe y es protegida por la mafia en la Ciudad de México; situación extraña al ser la amante y no la esposa de Cárdenas Guillén.
Y la tercera en esta historia de amor es Ana Amelia Román Goytia, mujer que está presente en la vida del narco para poder participar activamente en el negocio del tráfico de drogas.
Antes de su extradición a los Estados Unidos, Osiel recibía una visita muy especial, Román Goytia era de toda la confianza del capo y responsable de los sobornos a autoridades e incluso se encargaba de la plaza en Nuevo Laredo.
Es así como el considerado responsable de crear a ‘Los Zetas’ estuvo rodeado de lujos y decidió compartirlos con varios mujeres, que ahora pelean por el amor y dinero del capo.
VER: Cártel del golfo, primera organización criminal de México