Es hija de la tapatía Alejandrina Salazar Hernández y Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chapo’; Alejandrina Giselle apareció en la escena mundial al ser detenida cuando trató de ingresar a los Estados Unidos con una visa falsa.
Aparentemente su intención era tener a su hijo en el país vecino, pero debido a la falta estuvo en prisión 65 días, posteriormente regresó a México.
En la primera audiencia realizada en la sala del Cuarto Distrito Federal del Sur de California, Guzmán Salazar compareció con el uniforme naranja de un centro de detención que no ha sido dado a conocer por razones de seguridad, y ante el juez Jan M. Adler declaró ser inocente.
Por consejo de su abogado, la hija del famoso capo se declaró culpable y como la pena considerada por los cargos imputados ya se había cumplido dejó la cárcel.
Tras ese episodio,cuatro años después el nombre de la heredera de Guzmán Loera volvió aparecen en los medios al revelarse que el Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual (IMPI) le concedió usar la marca ‘Chapo’ para elaborar y comercializar joyas, relojes, juguetes y artículos de piel, entre otros productos.
El permiso comercial que autorizó la dependencia mexicana a Guzmán Salazar tiene vigencia hasta el 2020, se desconoce si la joven de profesión médica obtuvo ganancias con la marca de su padre.