Se cree que la Rosca de Reyes tiene su origen en las saturnales romanas, que eran festejos dedicados al dios Saturno. En dichas festividades se elaboraba un pan redondo con higos, dátiles y miel que era repartido entre todos.
Algunas otras versiones apuntan a que la Rosca de Reyes es una representación de la corona de Adviento. Éste último es un periodo de cuatro semanas previas al nacimiento de Jesús; la Iglesia Católica tiene la tradición de colocar una corona con cuatro velas y encender una cada domingo previo a la Navidad.
La tradición marca que la Rosca de Reyes se parte el 6 de enero, el día en que los sabios de Oriente visitaron a Jesús y le hicieron regalos.
En nuestro país fue donde se adoptó poner un muñeco alusivo a Jesús dentro de la rosca, esto en alusión a que el niño Dios tuvo que ser escondido debido a la matanza de menores que realizó el Rey Herodes.
La tradición mexicana señala que quienes se sacan el niño en la Rosca están comprometidos a poner los tamales el Día de la Candelaria que se celebra el 2 de febrero.