En época de cuaresma y en el resto del año los charales del lago de Chapala son más que una botana natural.
Este pececillo, que no rebasa los 13 centímetros de largo, es una fuente importante de calcio natural por lo que consumirlo aporta minerales que nuestro organismo necesitan.
De acuerdo con el blogg javiernaturopata, los charales son un pez originario de los lagos del altiplano mexicano como Chapala, Pátzcuaro y Cuitzeo. En Jalisco este pez se consume como una rica botana o entremés en los restaurantes de la ribera de Chapala.
Treinta gramos de charal fresco contienen 708 miligramos de calcio natural, la segunda concentración más alta de este mineral que puede ser obtenido de una fuente animal.
El animal que aporta más calcio de manera natural son los acociles, conocidos también como langostitas de río
Además de proporcionar calcio de manera orgánica los charales proveen de otros minerales como potasio, fósforo, hierro magnesio, yodo y niacina.
El consumo de charales secos aportan aceites omega tres, pocas grases y nada de carbohidratos, además aportan vitaminas B, C, E y A esenciales para el desarrollo del sistema nervioso.
Por esto y más cuando visites Chapala no olvides consumir charales, ya sea enchilados empanizados con sal y limón, será la botana perfecta.