Además de la belleza de su paisaje por contar con el lago natural más grande de México, Chapala tiene atractivos gastronómicos.
El más importante de ellos son los charales, una especie de pez que habita en la zona lacustre y que los pobladores lo preparan de diferentes maneras, uno de ellos es como botana o entremés.
La manera más tradicional de comer este pez, que en edad adulta llega a los 10 centímetros de largo, es freírlo ya sea empanizado o al natural y comerlo con sal, limón y chile.
Este platillo es el más tradicional, ya que es ofrecidos en restaurantes, estanquillos y por vendedores que rondan la zona turística del malecón.
Sin embargo hay otras formas de degustar los charales que pueden ser preparados en salsa verde, en una ensalada de nopales, en mole, en omelette o simplemente fritos.
La próxima vez que visites Chapala recuera probar los charales sin duda te encantarán.